Nunca he sido una persona demasiado exigente en ciertas cosas, sin embargo si lo he sido para algunas pocas.
Nunca me ha dado por exigir en nada que sea material, siempre me he conformado con poco y he sabido valorar todo en la medida en que lo merecia, las cosas materiales, al fin y al cabo acaban perdiendo su valor en un momento o en otro.
Ha sido totalmente distinto con las cosas a las que normalmente no damos importancia, pero que realmente tienen toda la importancia del mundo.
Para empezar siempre he sido muy exigente conmigo misma, a veces incluso dura, pero no me arrepiento de ello hoy por hoy me siento orgullosa de ser como soy y de haberme exigido tanto en algunos momentos, por que me ha hecho darme muchos tropezones pero también aprender mucho de cada uno de ellos.
Además soy exigente con la gente que me rodea, me gusta la sinceridad y no solo de las palabras, si no también de los gestos, de los roces, de los besos...
No me gusta tener a un Judas a mi lado... y por eso exijo que quien haga algo que lo haga por que realmente le sale, no por que es lo correcto o lo moral.
No me gustan los cumplidos por cumplir, ni las sonrisas por quedar bien.
No me gustan las palabras que suenan vacías y que no tienen nada mas allá de las letras.
Me gusta exigir que los que esten conmigo me sientan, que vea que no soy igual con cada uno de ellos que siento por ellos cosas distintas y que es por eso por lo que todos son distintos para mi.
Soy exigente a la hora de los detalles, prefiero un beso con sentimiento, un abrazo con cariño que el mayor de los regalos que puedan comprar nuestros hoy en día preciados euros.
Una sonrisa de alguien que quiere realmente compartir algo contigo, una frase que no esperas de alguien que hace que el corazón te lata todavía mas fuerte cuando la pronuncia, las letras que vienen de cientos de kilometros que son capaces de hacerte sonreir como cuando eras niña, cosas como esas son las que para mi realmente tienen valor.
Y tú, como de exigente eres?
jueves, 7 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lleguè por las cosas de la vida a tu blog (como siempre sucede)....
ResponderEliminarcomento porque encuentro interesante un par de frases tuyas....
respondiendo a tu pregunta.. al menos yo soy demasiado exigente, en todos los ámbitos de la vida, siempre quiero obtener lo mejor, ser la mejor, y para lograrlo debo ser exigente de manera colosal.... Ademas de ser así conmigo con los demas es casi peor, al igual que tu no me gustan las risas falsas, los saludos cinicos, las palabras de cortesia, los abrazos forzados, los gestos ensayados y las conversaciones sin "alma", creo que por eso no soy muy sociable, ya que gente falsa es lo que más hay en este mundo.. y no las tolero..
Y tambien por lo mismo mis cercanos saben que de mi no recibiran nada de eso, sino cosas directas y sinceras..
Soy muy exigente??... :P